Mienta Para Trabajar, Trabaje Para Mentir

Por: Andrés Villa

El trabajo es uno de los principales promotores de la mentira en este triste país y me imagino que alrededor del mundo también. Para conseguir un empleo no se necesita más que mentir y entre más usted lo haga mucho mejor, estará cada vez más cerca de conseguirlo porque el empleador, la economía, la sociedad y el mundo, sólo espera que usted mienta. Que lo haga con mucho estilo, con entusiasmo, sin dudarlo y con mucha preparación. En pocas palabras: no necesitan su yo real. Quieren que usted y su imagen real, no sean más que una mancha borrosa dificil de percibir y de caracterizar, pero que no interfiere con lo que se quiere mostrar, lo adecuado, lo correcto, lo de adultos, lo de la gente bien. A quién le gusta ver una fea verdad atravesarse en el camino?

Por eso mienta!. Si quiere un trabajo no necesita más. Mientale a sus padres, a sus amigos y familia diciéndoles que cree haber encontrado el trabajo más adecuado. Dígales que se siente feliz porque lo llamaron a una entrevista, que el sueldo no está nada  mal, que ya estaba aburrido de no hacer nada, que menos mal, que qué alivio. Miéntales diciendo también que lo más seguro es que le den el trabajo, cuénteles lo que va a hacer con el primer sueldo, que esta vez si se va a poner a ahorrar y que con un sueldo fijo las cosas son más estables.

Mienta poniéndose corbata, vestido o esos zapatos que no se pondría ni loco. Mienta bañándose y perfumándose si es uno de los que no les gusta tanto el baño. Mienta sintiéndose feliz mientras se mira al espejo con semejante pinta! Mientale a los demás haciéndoles creer que usted es una persona de bien por la vestimenta que lleva, que hoy es su día. Que el corte o el peinado no fue en vano.

Al entrevistador, por supuesto no lo deje sin mentiras. Aquí es donde debe ir la parte preparada. Dígale que es el trabajo más apropiado para usted. No se le olvide mencionarle que usted quiere contribuir al crecimiento de la empresa, aprender. Dígale también que más que el dinero, a usted le interesa la experiencia, la posibilidad de progresar, de cumplir sus metas. Si le preguntan por las drogas, obvio diga que no, que nunca, échese la bendición y haga cara de sorpresa, eso lo último. Más bien comenteles que usted es el más adecuado, que puede trabajar en equipo, que le gusta resolver problemas, ponerse retos y que además tiene una buena capacidad de liderazgo.

Si siguió con cuidado los pasos mencionados, de seguro pasa la primera étapa. Responda con una sonrisa todo lo que le pregunten (al personal de la empresa) de aquí en adelante, desmotive a sus contrincantes con logros inventados o ligeramente tergiversados,  diciéndoles que usted viene recomendado y que aparte esta mañana su abuelita le echó la bendición que no le falla. Hable de lo bien que le fue en los trabajos anteriores, de que ya  ha trabajo en lo mismo y que gente de la empresa (amigos suyos) ya le ha comentado cómo es que se mueve la cosa por lo que a usted lo único que le falta es comenzar. Consiga orina de anciano, niño o cualquier otro animal para los exámenes médicos. No exprese ningún tipo de molestia o limitación, no se le ocurra mencionar enfermedades graves u operaciones de cuidado que haya tenido. A quién le importa?

Si lo hizo bien estará trabajando o a punto de firmar un contrato y de iniciar en su empleo. Ahora sólo queda que comience con las mentiras más grandes, y las más importantes si de tener un trabajo se trata: las que se dice y se cree usted mismo. Dígase que estará feliz cada mañana de levantarse a cumplir un horario, también que no le importa tenerse que disfrazar y renunciar a sus cómodas prendas, que lo más correcto es dejar a sus hijos todo el día en las manos de un extraño, que la rutina no es más que una cuestión de costumbre. Convénzase de que su salario es justo. No se le olvide decirse que no tiene ganas de tratar a su jefe de la misma mala manera en la que él lo hace, que disfruta cada momento de la compañía de sus compañeros, que trabajar todo el día en una oficina sentado frente a un computador o manejando una máquina es un sueño cumplido. Por último, para que no hayan problemas ni desánimos, repita que no es bastante frustrante, que no abandona su tiempo, y que en realidad no está renunciando a usted mismo sólo por unos billetes.